Bañó en thinner y estranguló a su pareja en un ataque de celos

La mañana del sábado 8 de noviembre comenzó con alarma en la vía entre Pereira y Alcalá, cuando residentes del sector de Cuba pidieron auxilio al notar una riña dentro de una ferretería. Una patrulla que realizaba controles en la zona atendió el llamado y se encontró con una escena de extrema violencia: una mujer estaba siendo golpeada sin misericordia por su expareja, quien la había encerrado en el establecimiento.

Los uniformados ingresaron al local y capturaron a John Harley Rodríguez Almonacid, de 36 años, mientras la víctima, identificada como Ángela María, relataba entre sollozos que su agresor la había atacado con puños, patadas y amenazas de muerte. Según contó, no era la primera vez que lo denunciaba ante la Fiscalía.

La mujer explicó que convivió 17 años con él y que tienen una hija en común. Sin embargo, la relación terminó en enero debido a constantes agresiones verbales y psicológicas. En días recientes, Rodríguez insistía en revisar su teléfono y, tras enterarse de que ella tenía una nueva relación, su conducta se tornó más violenta. La noche anterior al ataque, durante una llamada telefónica, él le advirtió que se “arrepentiría” si le colgaba.

El sábado, Rodríguez llegó temprano al local donde ella trabajaba, cerró las puertas y la acorraló. Según la denuncia, le dijo que ambos morirían allí mismo antes de lanzarse sobre ella con golpes que la dejaron en el piso. La estranguló en cuatro ocasiones, causándole pérdida de conocimiento, y continuó atacándola cada vez que intentaba levantarse.

El nivel de sevicia aumentó cuando el agresor abrió dos botellas de thinner y roció a la mujer y el interior del establecimiento, asegurando que el líquido era inflamable y que morirían quemados. En medio del pánico, la víctima logró romper una ventana y pedir auxilio. Un vecino entró al local, pero Rodríguez siguió golpeándola incluso frente a él.

Minutos después, otro ciudadano corrió por ayuda policial. Aunque el agresor volvió a cerrar el local, los uniformados llegaron a tiempo para impedir que el ataque terminara en tragedia. Cuando ingresaron, la víctima estaba cubierta de thinner y presentaba múltiples lesiones en el rostro, la cabeza y el cuerpo.

La Fiscalía detalló que el ataque duró cerca de una hora y quince minutos y que los mecanismos de violencia empleados por Rodríguez tenían la capacidad de causar la muerte de la víctima. Para el ente acusador, los hechos fueron impulsados por celos y un sentimiento de propiedad, pues el hombre no aceptaba el fin de la relación ni que Ángela María iniciara una nueva vida.

Durante la audiencia, la Fiscalía 17 Local URI imputó a Rodríguez el delito de tentativa de feminicidio agravado. Aunque no aceptó los cargos, el juez Primero Promiscuo de Balboa ordenó enviarlo a prisión, considerando la gravedad del caso y el riesgo que representa para la víctima.