A la cárcel Capitán investigado por abuso sexual

Con una serie de evidencias presentadas a favor y en contra del uniformado, quien fue imputado por acceso carnal con persona incapaz de resistir, soborno y destrucción u ocultamiento de evidencia física con varios agravantes, según Jairo Corzo, abogado de la víctima, se determinó enviarlo tras las rejas.
Sin embargo, su defensa presentó una apelación ante el Juzgado, por lo que en una segunda instancia podría llegar a darse un cambio en su medida, ya sea la detención domiciliaria o incluso la libertad.
Ké se dice conoció que en este proceso judicial se habrían compulsado copias a cinco policías más y a algunos civiles, lo que significa que podrían ser vinculados – al parecer – por su presunta intervención para alterar la investigación.  
 

Se ‘aguó’ la celebración

Todo esto se desencadenó luego de que se realizará una celebración de ascensos en el Comando de la Policía en el ‘Puerto Petrolero’, para la noche del 23 de octubre y la madrugada del 24.
Luego de dicho evento, en el que participó Mendoza Blanco, el cual ejercía en su momento como comandante de la Policía de Carreteras, el festejo se habría trasladado a un establecimiento público, según versiones de los hechos.  
A esa celebración asistió una patrullera junto a su compañera sentimental, L.D.G.M., una mujer de aproximados 30 años y quien ahora es la presunta víctima de este caso.  
En declaraciones de las denunciantes, la civil invitada al lugar se sintió mareada luego de unos tragos y entonces se retiró a uno de los vehículos oficiales para descansar; sin embargo, poco después la patrullera habría ido a ver cómo seguía ella, encontrando al capitán en el presunto abuso a la víctima.
En favor de la mujer se presentó el resultado de unos exámenes que confirmaban una lesión en su himen; además se indicó que su ropa interior estaba con sangre y prendas que usaba esa noche tenían rastros de semen.
Tanto la patrullera como su compañera denunciaron que han sido objeto de intimidaciones con motorizados que las rondan, llamadas de desconocidos, intentos de soborno y hasta persecución laboral en el caso de la uniformada, razones por las cuales salieron del municipio durante un tiempo, sintiéndose en peligro ellas y sus familiares.
Por su parte, en favor del acusado se analizan varios testimonios de este proceso judicial para verificar su veracidad y coherencia en distintos escenarios. Sin embargo, el Capitán permanecerá por ahora en la cárcel.