Los sicarios remataron a Luis en el Café Madrid

Apenas con 20 años, los conflictos que tendría con algún enemigo le generaron una muerte violenta a Luis Sneider Santos Durán, quien fue atacado a bala esta mañana en el Norte de Bucaramanga.

En un sector cercano a su lugar de residencia, por un callejón en la calle 38 del barrio Café Madrid, sicarios lo ubicaron y se encargaron de confirmar su deceso.

Primero, habría sido sorprendido con un disparo a distancia y a pesar de la herida – según testigos – habrían intentado escapar de la ‘huesuda’ subiéndose a las escaleras de una vivienda… pero las fuerzas no le alcanzaron.

Al caer tendido, indica una versión, quien empuñaba el arma de fuego lo habría seguido hasta tenerlo a centímetros para balearlo otra vez, asegurándose de dejarlo sin aliento.

Ocurrió a plena luz del día, mientras la comunidad comenzaba sus distintas actividades cotidianas, que fueron interrumpidas por los estallidos del odio. 

Luego, tras un ágil procedimiento de levantamiento, el cuerpo fue trasladado a Medicina Legal mientras las autoridades buscaban pistas del o los asesinos.

“Nunca se le conocieron problemas”

Una familiar de Sneider lo recordó como una persona a la que nunca se le vieron “problemas; él no era agresivo, la gente lo quería mucho, incluso le había hecho una llamada esta mañana para que fuera a ver unos cerdos que le ayudaba a alimentar a un vecino. Pero no me contestó porque el teléfono estaba cargando… luego avisaron que lo habían matado”.

Habitualmente Santos Durán “sacaba arena en el río, sacaba piedras, hacía mandados, descargaba camiones en una bodega aquí en Bavaria 2” para ganarse el sustento.

Su ser querido, quien lo vio por última vez hacia las 7:00 a.m. mientras él le invitaba a desayunar y le dejaba “un mercadito para el almuerzo”, le dijo que le acompañara en esa primera comida del día en la casa, pero Sneider habría elegido “ir a dar una vuelta primero”… y nunca volvió.

“Él amigos no llevaba a la casa, andaba solo en la casa y en el barrio, no era ‘compinchero’ en la calle. Pero uno los conoce de puertas para adentro, de puertas para afuera uno no sabe quiénes son”, lamentó su familiar en luto.