Policía habría estado involucrado en asalto a la joyería Franco en Bucaramanga

Un policía, presuntamente, habría estado involucrado en el robo millonario a la joyería Franco del centro comercial San José Plaza, en Bucaramanga, que tuvo lugar el 23 de julio de 2024 y generó inquietud entre los ciudadanos.

La Fiscalía General de la Nación lo anunció de este modo luego del arresto y la judicialización del subintendente de la policía nacional, Yeison Eduardo García Albarracín.

Según la investigación, el policía habría proporcionado a los miembros de la pandilla criminal Los Kilates, que cometió el robo, dos armas de fuego (una pistola traumática) y un uniforme de la Policía Nacional, los cuales se habrían empleado en el acto delictivo.

El ente acusador comunicó que el investigado también habría proporcionado información judicial acerca de la pesquisa asociada con el hurto, así como presuntamente haber prometido eliminar los videos de las cámaras de seguridad de una bodega donde los miembros de la banda habrían planeado el robo.

El 9 de noviembre, en Bogotá, la Sijin detuvo al subintendente tras una orden judicial. La Fiscalía le atribuyó los crímenes de hurto calificado y agravado, fabricación, tráfico y porte de armas o municiones de fuego, uso ilegal de insignias y uniformes, así como cohecho propio; sin embargo, él no los admitió.

La banda criminal llamada "Los Kilates" robó en la mañana del 23 de julio de 2024 alrededor de mil millones de dólares en joyas, durante un atraco cinematográfico.

El hurto, que se habría iniciado en el barrio San Miguel, tuvo lugar antes de las 8:00 a. m. cuando los asaltantes se prepararon. En total, habrían empleado un número parecido de motocicletas y al menos seis vehículos, que incluyen automóviles y una camioneta.

A poco de las 9:00 a. m., dos coches aparcaron al lado del antiguo edificio de Copetran. Un "campanero" estaba observando desde la carrera 15 hacia la Puerta del Sol, donde la Policía estaba reunida por un paro de taxistas.

Uno de ellos organizó una llamada grupal para coordinar las acciones. La organización se extendió por toda la carrera 17C, desde la calle 54 hasta llegar a la calle 61.

Los primeros delincuentes vestidos con uniformes policiales llegaron a las 9:32 a. m., cuando los trabajadores de la joyería estaban realizando sus tareas diarias, según informaron los propios empleados.

"Dos individuos armados, los dos con uniforme policial, ingresan y comienzan a golpear e intimidar al guardia. Los trabajadores relataron: "Les dicen que no se muevan y después llegan cuatro más".