Una camioneta ‘apagó’ a Alba Luz en El Poblado

Una sábana camufló el dolor de Alba Luz Hernández Pedroza, mientras se encontraba en el asfalto tendida, con muy pocas fuerzas luego de que una camioneta le pasara por encima esta mañana, en el barrio El Poblado del municipio de Girón.

La mujer de 50 años, identificada por muchos como una persona en condición de calle, se había quedado dormida sobre la vía, arropada en la calle 37 con carrera 23, cuando hacia las 7:40 de la mañana el peso del automotor la estremeció.

Era una Nissan Murano con placas EHK-125, conducida por un hombre de 32 años, quien, indican vecinos, “iba saliendo de la enseñanza de conducción. Eso varios empezaron a gritar por lo que pasó y se congestionó la calle”.

En su agonía, Alba luz había quedado con un trauma craneoencefálico severo y un trauma de tórax cerrado, que limitaba sus movimientos, mientras varios trataban de comunicarse con una ambulancia para que la ayudaran.

En la espera, la mujer también fue sometida a la mirada de algunos indolentes, ya que un testigo indicó que, “incluso, un muchacho pasó y le dijo que eso le pasaba por guarapera”.

Finalmente arribaron los socorristas “y la llevaron hasta el Hospital de Girón (…) Después fue que vino la Fiscalía a tomar fotos (en la vía) y frente a la casa, ahí yo imaginé que ya había fallecido”, agregó el residente.

Y así fue, estando en manos de los galenos, quizá a causa del tiempo en su traslado y ante las sobrecogedoras heridas, la ‘luz’ de Hernández Pedroza se extinguió para siempre.

De andén en andén

En El Poblado, varios residentes aseguraron que antes de la tragedia se habían percatado de que Alba Luz estaba “costada en medio de la carretera” y que por esa razón habían “llamado a la Policía para que la corrieran de sitio”.

Ellos aseguran que desde las 5:30 de la mañana percibieron a la mujer con su sueño en zona peligrosa, pues “estaba frente al parqueadero de un vecino que necesitaba salir a trabajar, entonces él le dijo que se corriera.

“No sé qué tendría la señora, pero no era capaz de pararse. Lo que hizo fue rodar como hacia el otro andén, pero llegó hasta la mitad de la calle y ahí los carros entonces se corrían”.

Agregan que como “a las 6:00 de la mañana llegaron unos policías en moto, se quedaron un rato parados para decirle que se moviera, pero no pasó nada más”; hasta que se registró el siniestro vial.