Fuertes protestas en Irán por asesinato de una joven

A 11 ascienden los muertos en medio de las fuertes protestas que se viven en Irán por el asesinato de Mahsa Amini, una joven kurda de 22 años que murió tras ser detenida por la Policía Moral por no portar ‘correctamente’ su Hiyab o velo, el cual debe cubrir toda la cabeza.

Amini fue capturada el 13 de septiembre – señalada de vestir de forma inadecuada – y tres días después murió en un centro médico luego de desmayarse y caer en coma por señaladas torturas. Aunque la Policía habría indicado que se trataba de un presunto infarto.

Entre las víctimas letales de los enfrentamientos entre la ciudadanía y las autoridades en Irán, se cuentan una mujer madre de tres hijos y un adolescente de 16 años.

Además, la organización de Derechos Humanos Hengaw contabiliza más de 400 lesionados en medio de las manifestaciones que se dan principalmente en la provincia de Kurdistán y en un total de 50 ciudades y pueblos del país, incluyendo su capital: Teherán.

Este movimiento de la ciudadanía es considerado la ola más grande de protestas desde el 2019, cuando miles de personas salieron a manifestarse contra el aumento del precio de la gasolina.

La ONG detalló en su Twitter que dos de los muertos eran de la ciudad de Divandaré, cuatro más eran originarios de Piranshahrm, Saqqez, Dehgolan y Qasr-e Shirin, y cuatro más fallecieron en la ciudad de Urmía.

Entre las víctimas mortales también se cuenta un agente de Policía en la ciudad de Mashhad, al noreste de Irán, según el gobernador de Shiraz, Lorfolá Shibani. Otros cuatro uniformados resultaron heridos.

También se han realizado arrestos masivos, por lo cual la ONG Hengaw indica cifras de hasta 500 kurdos que han sido detenidos en los últimos cuatro días por las fuerzas de seguridad.

Es tanto el temor por lo que ocurre en el país, que muchos de los “heridos no han visitado los centros médicos por miedo a ser detenidos”, según el ente no gubernamental.

Mientras la Policía de Teherán afirmó el lunes que la muerte de la joven se trató de un “incidente desafortunado”, el presidente de Irán, Ebrahim Raisi, se contactó vía telefónica con la familia de Mahsa Amini para prometerles una minuciosa investigación al respecto.

Junto con las protestas se ha despertado un movimiento de mujeres que se graban quitándose el velo, quemándolo o cortándose el cabello, como una forma de reclamar por este asesinato y pedir justicia.