Exempleada denuncia acoso por parte de asesor del HUS

Una denuncia se ha hecho viral en redes sociales por parte de Tatiana Mejía Rueda, quien laboraba hace cuatro años como contratista en el área Administrativa del Hospital Universitario de Santander en Bucaramanga, hasta que – denuncia – el acoso de un asesor de Gerencia le habría hecho salir de la entidad.

En una entrevista con la activista de Derechos humanos Olga Materón, la joven señaló con nombre propio a Wladimir Rojas Martínez, de quien, dice, “comenzó a evidenciar cierto tipo de comportamientos que no me gustaban. Insinuaciones del carácter: ‘Si usted estuviera conmigo le podría ir muy bien’”.

Aunque intentó poner barreras, esto no habría funcionado para Tatiana, quien vio que esta persona “intentaba abrazar y besar, tener contacto ya demasiado… pero luego pasó al acoso laboral”.

La joven asegura que recibía amenazas, “en medio de la zozobra continua que se vive en el hospital por el tema de contratación, me decía pórtese bien porque van a haber cambios”.

La gota que rebasó el vaso para Mejía, “más que los acercamientos que finalmente yo rechazaba, fue el tema laboral. El día que cogió mi agenda personal, pasó las hojas y le tomó fotos, me salgo de mis cabales y le digo: ¡Déjeme en paz! Pero empiezan los chismes de pasillo, las amenazas y a instrumentalizar a mis compañeros de trabajos para ejercer presión sobre mí.

“Decido buscar protección en la Gerencia del hospital, le comento al doctor lo que está sucediendo, me dice ponga la queja y la radico el 14 (de octubre), donde expongo la situación.

“Yo estoy contratada por una empresa y él está contratado por el hospital, entonces técnicamente él no hacía parte de mí empresa, pero en la práctica sí. En la empresa me citan a una conciliación donde doy mí versión de los hechos, ellos diligencias un formato, que es el que tiene el hospital para estos casos, para que pase a control disciplinario del hospital.

“Mi empresa cumple con lo que tienen que cumplir, lo pasa al hospital, pero en el hospital sencillamente no pasa nada, y un mes después lo único que yo recibo es la carta donde dice que mi cargo es suprimido del contrato (…) y esta persona sigue en el hospital como si nada”, expresa Tatiana.

Por su parte, el Hospital Universitario de Santander emitió un comunicado de prensa en el que aseguró que Wladimir Rojas Martínez es “un contratista de la institución” y no un contrato directo, como lo menciona en su versión la joven.

El HUS agregó que “una vez conocida la queja radicada ante el Comité de Convivencia Laboral, se procedió inmediatamente a poner en conocimiento de la situación a la Oficina de Control Interno Disciplinario, donde se adelantan las investigaciones correspondientes. Todo en virtud del cumplimiento al deber legal”. 

Finalmente, indicó que “la situación publicada atiende a presuntos hechos entre particulares, los cuales difieren de los principios y valores de la Institución, que promueve la prevención de todo tipo de violencia basada en género”.