Durante una riña en un billar, le cortó la cabeza a su rival y la tiró en la calle

Lo que comenzó como una madrugada de música, licor y juego de billar en un establecimiento de la vereda Bellavista, en Coveñas, terminó convertido en uno de los crímenes más impactantes registrados en Sucre en los últimos años. En el centro del local, Carlos Andrés Pantoja Agámez, de 38 años, y Jhony Feria Julio, de 25, sostuvieron una discusión que fue escalando hasta llegar a niveles de violencia inimaginables.

Testigos relataron que ambos hombres forcejearon en medio del local mientras varias personas intentaban calmarlos. En un momento de la riña, Feria Julio tomó una botella, la estrelló y atacó repetidamente a Pantoja Agámez. En las imágenes, difundidas por medios locales, se observa a la víctima tambaleándose, herido, incapaz de mantenerse en pie. Los presentes pedían detener la agresión, pero no lograron controlarla.

La situación se tornó aún más aterradora cuando, tras la primera agresión, Feria Julio salió del establecimiento y regresó con un machete. El pánico se apoderó del billar: clientes y vecinos corrieron a refugiarse mientras el agresor continuaba atacando a Pantoja Agámez. Según la Policía, el ataque fue tan brutal que el victimario terminó por decapitarlo.

Vecinos que se encontraban a pocos metros quedaron paralizados al ver a Jhony Feria caminar con la cabeza de la víctima entre las manos. Según el relato de la comunidad, avanzó varios metros por la vía principal con una aparente calma que desconcertó incluso a quienes lo conocían. Finalmente, arrojó la cabeza sobre la carretera.

Alarmados, los habitantes dieron aviso inmediato a las autoridades. En cuestión de minutos, unidades policiales llegaron al lugar, donde encontraron el cuerpo sin vida y a decenas de vecinos todavía en shock por lo ocurrido. Gracias a la descripción rápida de los testigos, los uniformados lograron ubicar al presunto homicida y capturarlo en flagrancia.

La Policía Nacional informó que al detenido se le garantizaron sus derechos y fue puesto de inmediato a disposición de la Fiscalía para su judicialización. Paralelamente, la Alcaldía de Coveñas rechazó públicamente el crimen, calificándolo como un hecho atroz que golpea profundamente a la comunidad.

El municipio convocó una mesa de coordinación con la Fuerza Pública para analizar los hechos y determinar acciones de prevención y control. Además, la administración local pidió a la ciudadanía abstenerse de difundir videos o fotografías del ataque, señalando que la viralización de estas imágenes aumenta el sufrimiento de la familia de la víctima y revictimiza a toda la comunidad.

Carlos Andrés Pantoja Agámez era habitante del corregimiento de Sacana, en Momil, Córdoba. Su muerte ha generado consternación tanto en Sucre como en su municipio natal, donde familiares y allegados exigen justicia y apoyo psicológico ante un crimen que, aseguran, es imposible de olvidar.