Ramón Sosa, líder motero, fue asesinado por robarle su motocicleta

La tarde transcurría con normalidad en una vivienda de Villa del Rosario, donde Ramón Sosa Sosa, de 66 años, compartía con su compañera sentimental y otros familiares antes de emprender un viaje hacia Pamplona. En cuestión de segundos, la tranquilidad se rompió de forma violenta cuando dos hombres armados irrumpieron en el lugar con la intención de cometer un hurto.

Según relataron testigos y familiares, uno de los delincuentes se acercó directamente al adulto mayor y le exigió las llaves de su motocicleta. Sin darle tiempo de reaccionar, el agresor accionó un arma de fuego y le disparó a corta distancia en la cabeza. El ataque generó pánico entre los presentes, mientras los responsables huían rápidamente del sitio a bordo de una motocicleta.

La principal motivación del crimen habría sido la motocicleta de la víctima, una Kawasaki KLR 650 que Ramón Sosa había adquirido en Estados Unidos y trasladado por carretera a través de varios países de Centroamérica, hasta importarla y legalizarla en Venezuela. El vehículo, de alto valor, habría llamado la atención de los asaltantes.

Gravemente herido, el hombre fue auxiliado y trasladado de urgencia al Hospital Jorge Cristo Sahium de Villa del Rosario, donde el personal médico logró estabilizarlo de manera temporal. Debido a la complejidad de la lesión, fue remitido posteriormente al Hospital Universitario Erasmo Meoz, en Cúcuta, para ser sometido a una intervención quirúrgica especializada. Pese a los esfuerzos médicos, falleció horas después.

Ramón Sosa Sosa era comerciante, padre de dos hijos y una figura ampliamente reconocida en el mundo del motociclismo de alta cilindrada. Se desempeñaba como presidente de la Hermandad Motera Barinas, organización que lamentó su muerte y anunció una campaña solidaria para recolectar fondos destinados a la repatriación de sus restos.

Las autoridades avanzan en la recolección de pruebas y el análisis de cámaras de seguridad del sector con el fin de identificar y capturar a los responsables de este homicidio, que vuelve a encender las alarmas por la inseguridad en el área metropolitana de Cúcuta.