Extinción de dominio a 8 bienes por vender contrabando

Bucaramanga estuvo entre las 11 ciudades del país donde la Dian, la Fiscalía y la Policía Fiscal y Aduanera realizó la megaoperación ‘Asclepio’, logrando la extinción de dominio de 8 bienes que eran usados de manera reincidente para el almacenamiento y la comercialización de contrabando.  

Con este trabajo, las autoridades dejaron al descubrieron la venta de mercancías que ingresaron ilegalmente a Colombia desde el continente asiático, con una afectación de 3 mil 260 millones de pesos a la economía nacional. 

Junto a la capital santandereana, la investigación incluyó a Riohacha, Barranquilla, Cartagena, Cúcuta, Bogotá, Tunja, Medellín, Cali, Buenaventura e Ipiales, con dos importantes procesos operacionales denominados ‘Anfitriones’ y ‘Bruselas’.

Operación ‘Anfitriones’

Esta se dio en cinco inmuebles y tres establecimientos del centro comercial La Isla en Bucaramanga, avaluados en más de mil 600 millones de pesos, en los que se ejecutó una medida cautelar de embargo y secuestro y los cuales fueron entregados para la administración de la Sociedad de Activos Especiales, SAE. 

Según las autoridades, estos bienes estaban destinados al ejercicio de actividades irregulares de comercio, al acopio de numerosas mercancías de contrabando y como puntos de comercialización ilegal. 

De forma reincidente, estos sitios almacenaban, distribuían y vendían alimentos, medicamentos, suplementos dietarios, productos Fito terapéuticos, homeopáticos y cosméticos, de condición fraudulenta o de contrabando, sin registro sanitario y de procedencia asiática sin la documentación aduanera legal.

Operación Bruselas 

En esta fueron capturadas seis personas en igual número de allanamientos en Bogotá, Medellín, Pereira y Bucaramanga. También se incautaron 12 mil 161 unidades de medicamentos, por un valor de 560 millones de pesos.  

Modalidad delictiva

Toda esta investigación se inició desde mayo de 2018, exponiendo cómo los involucrados recurrían a la técnica conocida como ‘60/40’, que es esconder mercancía ilegal dentro de cajas de productos que ingresarían correctamente, siendo 60 por ciento legal y 40 por ciento ilegal, para evadir controles aduaneros y vender a bajo costo.

También se hizo evidente cómo estas mafias utilizan la ley para su beneficio, realizando operaciones comerciales por cuantías inferiores, sin sobrepasar a las tipificadas en las diferentes normas colombianas para no ser judicializados.